Cuando iniciamos nuestra vida sentimental podemos correr con la desdicha –inicial- de pensar que las relaciones son para siempre y que todo lo relacionado al amor de pareja es idílico. Conforme vamos creciendo podemos comenzar a notar que las cosas no son como en un cuento de hadas y menos aún cuando apenas estamos en la transición de la adolescencia y la adultez.
Luego, de un tiempo de experiencias, éxitos y fracasos, podemos caer en cuenta que la idea de relación que teníamos en la adolescencia estaba completamente errada, ya que una relación es mucho más que darse besos, tener relaciones sexuales y salir juntos. En la adultez, una relación de pareja seria –aunque tiene lo que mencionamos anteriormente, ya que es básico- la finalidad de esta no es solo goce.
El fin de una relación es complementar al otro, ser un apoyo para esta persona del mismo modo en como lo son para nosotros, de este modo, las parejas pueden crecer en el ámbito personal e ir pensando en un modo de vida, bien sea: comprar una casa, formar una familia, un matrimonio o cualquier plan en este sentido.
Sin embargo, es normal que luego de un tiempo en una relación, esta comience a mostrar problemas, ya que no existe la manera en que dos personas no difieran en alguna opinión, acción o hecho. Además, a la relación le pueden afectar cosas como: infidelidades, problemas familiares, problemas económicos y problemas laborales.
Es en este punto cuando la terapia de pareja debe aparecer, ya que a veces las personas quieren seguir juntas, bien sea por razones realmente sentimentales o por mutuo acuerdo de ambos, pero es difícil que por sí mismos arreglen sus diferencias. Entonces, una terapia de pareja es la que ayuda a salvar una relación, bien sea para entender diferencias o poder tolerarse más.
Qué es la terapia de pareja
Todas las parejas pueden pasar por momentos malos, lo que se debe considerar en este punto es la iniciativa por ambas personas por salir de la crisis en la que se encuentran por medio de la terapia de pareja, ya que de lo contrario esta supondría el fin de la relación.
Así bien, la terapia de pareja es el método por el cual muchas parejas buscan superar y salir adelante de un mal momento en la relación. La terapia de pareja es un proceso donde -mediante un psicólogo especializado en el área- se inicia un proceso terapéutico en el cual por medio de dinámicas se busca arreglar las diferencias o problemáticas que están haciendo daño a la relación.
Hay que tomar en cuenta que la terapia de pareja solo es efectiva cuando ambas personas están de acuerdo en salir adelante con su relación, ya que si es solo una la interesada no se podrá llegar a nada concreto, o bien, esta no tendrá buen resultado.
Una terapia de pareja no garantiza salvar una relación, ya que puede que el problema sea muy grande o determinante, así como una crisis económica, pero la terapia de pareja si ayudará a ver qué es lo que sucede desde un punto más objetivo, ya que sumidos en el problema y desde una posición personal puede que no nos demos cuenta que –quizás- estamos pasando por alto los factores la situación y tendemos a culpar por completo a nuestra pareja cuando realmente no debería ser así.
Efectividad de la terapia de pareja
Como mencionamos anteriormente, la terapia de pareja no garantiza la relación, ya que hay que tener en cuenta la disposición de la otra persona por salvar un matrimonio u otro tipo de lazo sentimental.
Sin embargo, cuatro de cada cinco parejas que van a terapia de pareja pueden ver de otra perspectiva la relación, pudiendo así comprender de otra forma lo que tanto les está causando incomodidad o inconformidad, tal como diferencias de acciones u opiniones.
Sabemos que no existe la perfección y que cada persona es de la forma en que es porque tiene una personalidad única, por lo tanto, no podemos esperar que la persona cambie a nuestro parecer, sino que, si de verdad tenemos un lazo afectivo, enamoramiento o como quieras llamarlo, hay que aceptar a esa otra persona. Lograr llegar a esta aceptación es una de las principales cosas que busca la terapia de pareja, claro está: siempre que el problema sea en este sentido.
Aclaramos lo anterior, ya que no siempre los problemas de una relación son por diferencias de pensamiento, a veces una pareja puede ir a terapia de pareja porque alguno de los dos fue infiel, lo cual es un acto que no se justifica, pero puede tener ciertos factores que influyan y esto –con la madurez y las ganas necesarias– puede ser resuelto gracias a la terapia de pareja.
En la terapia de pareja, el terapeuta o mediador es un psicólogo, en este caso debe estar especializado en casos de este tipo, es decir, en la psicología no solo general, sino lo que normalmente se ve cuando dos personas comienzan a llevar una relación de pareja, asimismo este profesional debe conocer mucho sobre relaciones interpersonales, comportamientos, entre otros aspectos relacionados a la convivencia de este tipo.
Hay quienes pueden pensar que el trabajo de un psicólogo es escuchar personas desahogándose y nada más, pero en realidad estas personas profesionales trabajan para hacer algo con este “desahogo”. Y en el caso de la terapia de pareja, se busca ir avanzando hasta conseguir que las personas puedan seguir delante de la forma en que mejor les convenga.
Consejos de la terapia de pareja
La terapia de pareja es en un principio para salvar una relación, aunque también se puede emplear este método terapéutico para tener una ruptura “sana” o “de buen trato”, así como también puede que personas divorciadas acudan a este tipo de terapia de pareja para mejorar el trato mutuo y no afectar a sus hijos, por ejemplo.
Los casos que se pueden ver en la terapia de pareja son casi infinitos, sin embargo, los principales consejos que se dan de forma general son los siguientes:
- Mejorar la comunicación. La comunicación es un asunto primordial para llevar una buena relación, no solo de pareja, sino de cualquier tipo de relación. Sin embargo, hay relaciones de más de cinco años donde el problema principal es la falta de comunicación, por ello uno de los principales objetivos de la terapia de pareja es mejorar este aspecto, ya que como se dice normalmente “todo se soluciona hablando”.
- Disminuir la tensión. En una relación hay que aprender a manejar los momentos malos, así como las discusiones, ya que estas pueden terminar muy grave si no se sabe controlar la tensión del momento. La terapia de pareja busca enseñar a ser más empático, entendedor y mejorar el dialogo en lugar del monologo.
- Superar y olvidar lo malo. Una mala experiencia o mal recuerdo puede volverse un factor importante e influyente en una relación, ya que no se termina de superar nunca y de este modo reaparece cada vez que la persona quiere, causando así nuevas y mayores peleas. Mediante la terapia de pareja se enseña a dejar esto atrás y lo recomendado es crear nuevos recuerdos y vivencias agradables.
- Mejorar la intimidad. En la terapia de pareja se hace mención de que no hay cosa tan importante en una relación como que ambos se sientan bien en el espacio íntimo, ya que esto no es solo por saciar un deseo carnal, sino que ciertamente esto hace que el lazo se mantenga, se fortalezca y ayuda también a disminuir las tensiones y problemas que se pueden tener en la rutina diaria.
- Demostrar los sentimientos. Muchos de estos aspectos parten del punto uno (la comunicación), es decir, tienen relación, pero no está de más decir que una persona abierta con sus sentimientos tendrá más éxito en una relación que aquel que se niega y se cierra en sí mismo; y la terapia de pareja ayuda a quien no es así por naturaleza, es decir, ayuda a reconocer este problema y mejorar.
- No depender. Tal como dice un título: “Amar o depender”, la terapia de pareja busca demostrar que una relación también debe dejar espacio para la independencia y esto no debe acarrear problemas que afecten al lazo afectivo y para quienes no conocen como lidiar con esto, terapia de pareja es la mejor opción para comprender este aspecto.
Ejercicios para terapia de pareja
Cuando se acude a terapia de pareja el psicólogo debe analizar los problemas de la pareja y a partir de este análisis y demás factores que puedan tener las personas, este procederá a crear un plan terapéutico que ayude a la pareja a llegar al punto que se quiere.
De este modo, el psicólogo puede optar por dinámicas o ejercicios para la pareja. En este caso te diremos varios ejercicios que puedes aplicar en casa para mejorar la relación con tu pareja, estos son utilizados muchas veces en terapias de pareja y son los siguientes:
- Pregunta qué le ha causado molestia. Una buena terapia de pareja es que optes por preguntar antes de dormir si durante el día algo le ha molestado a tu pareja, de este modo se pueden resolver detalles pequeños y evitar que todo se acumule y al final sea un problema mayor.
- Realiza una lista de agradecimientos. Un método empleado en la terapia de pareja es escribir una lista de cosas que tu pareja haya hecho y dásela, esto es un pequeño detalle que hará sentir apreciada a la otra persona y también te darás cuenta de las cosas buenas que ha hecho, las cuales normalmente olvidamos o no recordamos con frecuencia por dejarnos llevar por los aspectos negativos.
- Resuelve los problemas antes de dormir. Si han discutido por alguna razón, no dejes que esto se quede sin resolver, esto es vital en la terapia de pareja. Evita ir a la cama conflictuado con tu pareja. Usa el momento antes de dormir para lograr llegar a un punto en común o solución, no sigas la discusión porque así no llegaran a ningún lado.
- Haz una lista de cosas que quieres hacer con tu pareja. Toma un tiempo junto a tu pareja y escribe una lista de cosas que quieres hacer con ella, esto es un ejercicio de terapia de pareja que hace despertar la mente positiva y puede despertar aspectos buenos en la relación.
- Minutos de honestidad. Este es un ejercicio básico de la terapia de pareja que te permite decir todo lo que piensas honestamente sobre tu pareja por unos minutos, no máximo de 3 minutos, puedes decir cosas que te gustan o no de ella. Mientras te desahogas la otra persona no puede interrumpir ni opinar hasta que el tiempo ha terminado, tampoco puede molestarse, todo tiene que ser dicho de buena manera, claro está. Realiza esto un día a la semana y que cada uno tome su turno para hablar, esto sirve para entender mejor ciertos aspectos de la otra persona.
- Haz una lista de cosas que le pueden gustar a tu pareja. Este tipo de cosas recomendadas en la terapia de pareja pueden ser consideradas cursis, pero a veces son las cosas que le faltan a una relación, ya que la monotonía y el desinterés son los principales factores en dañar una relación.
Cuándo se necesita usar terapia de pareja
Las estadísticas indican que, en la mayoría de los casos, una pareja puede experimentar cinco o seis años de una relación con problemas antes de acudir a terapia de pareja, es decir, quienes acuden a terapia de pareja son personas que ya han tenido problemas por tiempos muy prolongados. Si bien, esto no es excluyente, también pueden ir a terapia de parejas aquellas personas que quieren comenzar una relación de la mejor manera o quienes desean mejorar la relación en un divorcio.
Independientemente de cuál sea el caso, hay señales que nos hacen saber que la relación necesita de una intervención para que sea mejorada o resuelta, es decir, hay cosas que nos indican que requerimos de terapia de pareja. Las señales que podemos identificar son las siguientes:
- La comunicación es negativa. Cuando la pareja se comienza a comunicar de forma constante usando insultos, criticas, ofensas y desprecio, es claro que la terapia de pareja es necesaria.
- Poca comunicación o temor al hacerlo. En la terapia de pareja se recalca que la comunicación no debe faltar en una relación sana, por lo tanto, cualquier inconveniente en este sentido debe ser tratado de inmediato si se quiere seguir en la relación.
- Fracasar al intentar mejorar la relación. si ya han intentado mejorar por sus propios medios y no han tenido éxito, se requiere de la ayuda de un psicólogo y de sesiones de terapia de pareja.
- Dejan de darse afecto. Una relación donde con cada pelea se recurre a dejar de ser amable y afectivo, es una relación completamente dañada, ya que esta no es la manera de resolver este problema. En estos casos la terapia de pareja es imprescindible.
- Te agobias. Cuando ya la presencia de tu pareja comienza a agobiarte más de lo que te satisface, se está presentando un escenario que necesita una mejora.
- Tienen vidas separadas. Si sientes que lo único que te une a tu pareja es que viven bajo el mismo techo, debes comenzar a considerar acudir a terapia de pareja.
- Ya no hay intimidad. Las relaciones sexuales dicen mucho de una relación y aunque no son lo primordial, en la terapia de pareja se señala que el tener problemas en este sentido puede ser muy grave para la relación.
- Acá debemos tomar en cuenta también el simple hecho de haber pensado ser infiel alguna vez, ya que demuestra que hay factores de nuestra relación que nos llevan a pensar eso y evidentemente es algo que debe ser resuelto. Este es una de las principales razones para recurrir a terapia de pareja.
- Hay secretos. Esto también parte de un problema comunicacional, pero puedes tomar en cuenta que, si te comienzas a guardar muchos secretos, debes considerar que la relación no va por un buen camino y necesitas ayuda con una terapia de pareja.
- No te sientes feliz. Esto es básico, si tu relación te resta felicidad, necesitas resolver cuanto antes el problema con terapia de pareja, ya que no es algo que debe suceder comúnmente.
Cuántas sesiones de terapia de pareja se necesitan
Las terapias en general dependen de la gravedad o tipo de problema que se tenga, por lo tanto, una terapia de pareja requerirá de la duración que sea necesaria.
En la terapia de pareja influyen muchos factores, ya que debemos tener en claro que depende de la persona y no del terapeuta, por lo tanto, hay parejas que pueden resolver sus conflictos en un par de sesiones, mientras que otras tardan y requieren de un tratamiento más intensivo y profundo.
En este aspecto también influye mucho la disposición de la persona, que tan abierta está a mejorar, el nivel de aceptación que tenga y su tolerancia en la terapia de pareja. Así bien, no podemos determinar un número exacto de sesiones, todo dependerá de qué tan grave sea el caso a tratar.
Cómo se estructura una terapia de pareja
Aunque cada pareja tiene sus propios problemas y diferencias, cuando se acude a una terapia de pareja siempre se recurre a un mismo modelo general, ya que el proceso de solucionar un problema debe constar de ciertos pasos básicos. De este modo, la terapia de pareja consta de la siguiente estructura:
- Etapa de reciprocidad positiva
- Etapa comunicativa
- Etapa de negociación
- Etapa de solución, acuerdos y resoluciones
Estas diferentes etapas pueden ser desarrolladas hasta en una misma sesión de terapia de pareja, siempre y cuando ambas personas lleven el proceso de la mejor manera posible. Sin embargo, dependiendo de lo grave del conflicto, el proceso puede tomar más tiempo, bien sea porque se recae en nuevas discusiones o porque el tiempo de cada una de las etapas se extiende para poder llegar a la resolución.
Es bueno conocer este tipo de detalles sobre la terapia de pareja, ya que las podemos tomar en cuenta y comenzar a aplicar el mismo procedimiento cuando se presente un nuevo problema en el hogar, así se puede evitar que la relación empeore o se llegue a un punto crítico.
Los métodos aplicados en la terapia de pareja pueden ser trasladados al hogar y aplicados en varios aspectos más de nuestra vida, ya que más allá de las relaciones sentimentales, en otras relaciones personales como las familiares, laborales o amistosas también se pueden presentar problemas muy similares a los tratados en la terapia de pareja, la única diferencia sería que en estas o influye de forma determinante los aspectos íntimos que sí están en una relación de pareja.
Para finalizar, podemos decir que la terapia de pareja puede estar dirigida a parejas que inician una relación y quieren hacerlo de la mejor manera, así como también la terapia de pareja puede ser usada por personas divorciadas o aquellos que tengas relaciones muy problemáticas.
No debemos pensar que la terapia de pareja es una opción absurda o que los problemas solo se resuelven solo en casa, ya que de ser así no existirían personas profesionales y especializados en este tipo de cosas.