Las fobias como todos sabemos son nuestros temores desproporcionados por algo concreto sin aparentes motivos sólidos y reales. En la mayoría de ocasiones este temor hacia un elemento concreto se desarrolla en ausencia de una experiencia adversa con éste, es decir, no es necesario haber tenido una mala experiencia con aquello a lo que hemos desarrollado una fobia.
No es conditio sine qua non caerse de una gran altura, para tener fobia a las alturas (acrofobia).
La manifestación a ese temor radica en la intención de nuestro inconsciente en querer protegernos, pero no podemos entender porqué. Se trata de una sobreprotección. Que tiene sus orígenes biológicos.
Los orígenes de las fobias
La explicación que dan los psicólogos evolucionistas, consiste en que estamos preparados biológicamente para adquirir ciertos miedos en etapas concretas de nuestra vida, ésto es debido a que nuestros antepasados, en el caso de los homínidos jóvenes, tenían que tener muy claro que tipo de animales debian de evitar.
Ese periodo sensible del sistema nervioso ante la respuesta de miedo con ciertos tipos de animales peligrosos o situaciones concretas, ha podido ser heredado generación tras generación. Ésta puede ser la causa biológica de muchas fobias, además del aprendizaje social, con el que se pueden adquirir miedos sólo con ver el miedo de otras personas ante ciertos estímulos, sin que resulte necesario haberlos experimentado personalmente.
Fobias más comunes
Las fobias más comunes son la aracnofobia (miedo a las arañas), agorafobia y claustrofobia (miedo a los espacios abiertos y cerrados respectivamente), sociofobia (miedo a ser juzgado negativamente en situaciones sociales)… Muchas de ellas también se desarrollan con la experiencia personal, en ciertos periodos sensibles de nuestra vida. No obstante, ese miedo intenso y desproporcionado tiene su origen y respuesta en las causas biológicas.