Amor de transferencia de paciente a psicoanalista

Páginas de libro formando un corazón

El fenómeno de amor de transferencia tiene mucha importancia, por su frecuencia, por ser inevitable, por su interés teórico y por su dificultad de resolución. A muchos profesionales en consulta les ha ocurrido una situación así. Tanto si eres paciente como psicoanalista te interesa saber por qué ocurre esto. En este artículo te explicaremos lo que puedes hacer al respecto si se produce este fenómeno en el contexto de la terapia.

¿Qué es el amor de transferencia y cómo se puede resolver?

Se trata de que el paciente se enamora del analista, donde encontramos tres soluciones: separarse y por tanto abandonar la labor analítica, contraer una unión legitima, o comenzar relaciones sentimentales ilegitimas y pasajeras, siendo ésta ultima imposible dada la profesionalidad del psicoanalista.

En el caso de abandonar la terapia por haberse hecho manifiesto este enamoramiento del paciente al analista, cuando el paciente se ponga en manos de otro profesional volverá a ocurrir, y lo mismo con un tercero, etc. Por lo tanto, para el paciente hay una alternativa; o abandona definitivamente todo tipo de terapia psicoanalítica o acepta inevitablemente un enamoramiento pasajero por el analista que le trate. Respecto al analista esta situación le indica que el enamoramiento del paciente hacia él no es por sus cualidades personales, sino que se debe a la situación psicoanalítica exclusivamente.

Qué debe hacer el psicoanalista ante el amor de transferencia

El enamoramiento que surge en la transferencia no es favorable. El paciente pierde el interés por su propia cura y solo piensa en su amor y en su correspondencia, se declara totalmente curado, no presenta síntomas o no se ocupa de ellos. Es difícil para el analista no caer en el error de dar por terminada una terapia y darse cuenta de la situación.

En primer lugar se debe sospechar que todo lo que se interponga a la cura es una manifestación de la resistencia, y por tanto esta resistencia ha tenido que participar ampliamente en las exigencias amorosas del paciente.

Se dan varios factores en este fenómeno, algunos de los cuales son claras manifestaciones de la resistencia y otros están relacionados con el enamoramiento. Entre los primeros se dan principalmente, el uso de la declaración de amor con el fin de poner a prueba al analista y la provocación intensificando el enamoramiento y exagerando la disposición a la entrega sexual para después justificar la acción de la represión. Entre los segundos se dan por ejemplo, la comprobación del atractivo del paciente, el deseo de quebrantar la autoridad haciéndole pasar de analista a amante, etc.

Seria un error que el analista rechazase el enamoramiento de su paciente, moviéndolo a renunciar a su amor imponiendo la moral, ya que la someteríamos a sublimación, a renunciar a sus instintos y a devolver a represión lo reprimido. Y tampoco es fácil racionalizar lo pasional, el paciente solo vería desprecio. Tampoco está bien decirle que le correspondemos y evitar al mismo tiempo cualquier acercamiento, porque eso seria un engaño y puede tener consecuencias negativas, así como fingir cariño, ya que puede convertirse en una transferencia reciproca.

En las nubes

El psicoanalista debe ser honesto y la cura debe desarrollarse en abstinencia procurando que la necesidad y el deseo no se conviertan en los motivos de cura para el paciente.

Consecuencias del amor de transferencia

En el caso de que el analista le correspondiese su amor para satisfacer su demanda de cariño y así acelerar la cura de la neurosis, el paciente conseguiría lo que todos los pacientes desean, es decir, reproducir en la vida real algo que solo debía recordar, pero esto conlleva también consecuencias muy negativas ya que posteriormente manifestaría todas las inhibiciones y reacciones patológicas de su vida erótica sin posibilidad de corrección. Lo que dejaría al paciente con grandes sentimientos de culpa y habiendo intensificado su tendencia a la represión.

Así pues, la represión es tan negativa como la satisfacción de las pretensiones amorosas del paciente. Lo adecuado es conservar el amor de transferencia pero lo tratamos como irreal, inevitable en el tratamiento y dejamos que nos muestre el camino hacia los orígenes infantiles de su amor para poder conducir ese contenido inconsciente a la conciencia.

¿Por qué ocurre el amor de transferencia?

Hay que añadir que este amor es una repetición de reacciones anteriores, incluso infantiles y se lo demostramos analizando su conducta amorosa. Pero hay que tener en cuenta un argumento en contra de lo mencionado y es que el carácter de todo enamoramiento es así, y que este amor, como el autentico amor también persigue un fin, por lo tanto no podemos negar la autenticidad del amor de transferencia en todos los casos. De todos modos tiene características especiales como por ejemplo, que es provocado por la situación analítica, es mas ciego a la hora de estimar a la persona amada y queda intensificado por la resistencia de la situación.

El fin del analista no es otro que devolverle al paciente su libre facultad de amar para que haga uso, en su fin ultimo, en su vida real. Se trata de enseñar  al paciente a controlar su principio del placer, haciendo una exploración de sus primeros años de desarrollo psíquico, y tratando así de aumentar su conciencia respecto a estos contenidos.

La transferencia como concepto psicoanalítico

Hay dos grandes teóricos en la ciencia que sostiene “la cura por la palabra”, es decir, en la historia del Psicoanálisis. Uno, al que se lo denomina el padre, Freud, y el otro un discípulo, aunque jamás se conocieron, Lacan.

Ambos fueron médicos y luego devinieron psicoanalistas. Uno de origen austríaco, y el otro francés, respectivamente. Mientras Freud desarrollaba su teoría a partir de la práctica, Lacan retoma todo lo escrito por Freud y lo profundiza a partir de la filosofía de Hegel, la lingüística de Saussure y aportes antropológicos de Levi Strauss. 

Lacan toma cada concepto psicoanalítico propuesto por Freud y los pasa por este tamiz, plagado de teorías que se complementan, para ahondar la teoría psicoanalítica y observar los efectos en los pacientes.

Lacan lee a Freud

En 1951, Lacan se dedica a trabajar sobre un concepto, la transferencia, a través del caso Dora, célebre caso que Freud llevó a cabo, el cual detalla en un escrito llamado “Intervención sobre la transferencia”. Así Lacan construye este texto a través de pasos lógicos e intervenciones dialécticas, es decir, a través de la dialéctica que involucra el diálogo entre Freud y Dora que da cuenta de la transferencia. Afirma que este caso es el primero en el cual que Freud da el concepto de transferencia como el obstáculo contra el que ha venido a estrellarse el análisis.

El psicoanálisis es una experiencia dialéctica y esta cuestión debe prevalecer cuando se plantea la cuestión de la naturaleza de la transferencia. Es que antes de toda intervención, la mera presencia del analista aporta la dimensión del diálogo. Asimismo, el psicoanálisis sostiene que hay una verdad subjetiva que se transmite por la palabra pero que está oculta para el sujeto porque es inconsciente, no sabida, por lo tanto, la responsabilidad del analista es que salga a la luz.

Caso Dora

El padre de Dora, a sus 16 años, la lleva a una consulta con Freud porque tiene ataques de tos y afonía, pero estos síntomas desaparecen espontáneamente, por un tiempo.

Regresa a los 18 años, dado que Dora deja una carta como “despidiéndose” que el padre encuentra y supone un intento de suicidio. Por eso, el padre toma la decisión de llevarla. En ese momento, los síntomas son de profunda desazón y cierta alteración de carácter. Ella relata una relación ambivalente para con su padre. Dora disentía y se enfrentaba mucho con él, lo cual contrastaba con el gran apego que la joven había desarrollado para con su padre. En contraposición a su madre, con ella tenía una mala relación.

A su vez, aparecen dos personajes, el Sr. y Sra. “K”, en el relato de Dora, amigos de la familia desde hacía varios años. Éstos cobran protagonismo en su vida, ya que mientras la Sra. K  sería la amante de su padre y el Sr. K habría intentado abusar de Dora.

Freud interpreta

La lectura que hace Freud sobre los dichos de Dora lo lleva a concluir que el interés de la joven es sobre el Sr. K. Desde sus intervenciones, Dora se identifica tanto con el Sr. K como con el mismo Freud, provocando en la joven una transferencia negativa. Es decir, aparecen las resistencias que en lugar de cesar para disolver los conflictos actúan como un escudo. El analista revive sentimientos hostiles complicando el diálogo.

Aunque Freud en un momento resalta que el amor y los celos hacia la Sra. K, en lo más inconsciente en tanto, no hay interés por la Sra. K, sino por la pregunta sobre la femineidad. Luego no lo toma. Lo descarta y sostiene la mirada hacia el Sr. K, provocando que el análisis fracase.

La lucha interna del psicólogo

El psicólogo libra un triple combate en su interior, contra los poderes que intentan hacerle descender del nivel analítico al de las fuerzas instintivas sexuales y le prohíben servirse de ello en su técnica científica, y en el análisis, contra sus pacientes, que al principio se comportan como los adversarios, pero manifiestan luego la hiper-estimación de la vida sexual que los domina, y quieren aprisionar al médico en las redes de su pasión, no refrenada ni mucho menos en la sociedad actual.

Conclusiones

Entonces, ¿qué son las transferencias? Son reediciones, recreaciones de las mociones y fantasías que a medida que el análisis avanza no pueden menos que despertarse y hacerse conscientes, pero lo característico es la sustitución de una persona anterior por la persona del analista. Toda una serie de vivencias psíquicas anteriores no es revivida como algo pasado, sino como un vínculo actual con el analista. Se sustituye una persona del pasado por el analista y ese amor que se liga es genuino, el paciente le dirige algo al analista. Pero, en la transferencia no se juegan solo nociones tiernas sino también hostiles. Por eso es por un lado el máximo escollo para el tratamiento y por otro el auxiliar más poderoso cuando se logra corregirla.

Freud capta que con Dora pasó algo a nivel de la transferencia: no logró dominarla a tiempo, lo que llevó a la ruptura prematura. La interrupción estuvo en relación a que Freud no logró seguir la línea de la relación de Dora con la Sra. K. Esto es lo que toma Lacan para ahondar sobre la transferencia en tanto dispositivo que el analista debe contemplar para acompañar a develar o reprimir la verdad inconsciente  del paciente.

Ingeniero informático, actualmente CEO y propietario de las empresas psiqueviva.com. Amo escribir y leer artículos interesantes e intento proporcionárselos a los usuarios de esta plataforma.

18 Comments

  1. No sé qué opinan pero el caso de la transferencia si merece un estudio profundo y muy serio.
    No solo en el amor sino también en la otra cara de la moneda, cuando alguien, hombre o mujer transfiere lo que no le gusta de su personalidad a alguien más.
    Es interesante porque, por lo común esta transferencia viene acompañada de un odio indescifrable que atormenta tanto al que lo siente que, en casos extremos puede llegar a la obsesión.
    Obsesión que atormenta, desgarra y perturba al grado de la locura a quién la siente.
    No sé qué opinan pero este tema me parece bastante interesante, porque me obliga a cuestionarme cuál es el verdadero origen de la obsesión.
    Cuáles son las motivaciones del obseso que encuentra en su objeto del deseo la satisfacción enfermiza a una vida tan vacía como sola y decadente.

    1. Desde mi punto de vista y basándome en la experiencia vivida y sentida en mis propias carnes, te responderé a tu pregunta de un modo breve y conciso. El enamoramiento en dicho contexto analítico solo conlleva irremediablemente a la obsesión, debido a la inaccesibilidad del objeto amado inalcanzable pero siempre presente. Es una droga, su presencia y contacto continuado, la dosis, muy placentera pero igual de dañina que la cocaína. Lo que ocurre es que el significado que se le da es diferente, connotaciones románticas, aunque el efecto final sea el mismo, sino es recíproco y se alimenta la esperanza (con abrazos efusivos). A nivel fisiológico los efectos son los mismos, la mente no distingue entre sustancia química o persona. Es una adicción más de ahí posiblemente el sentimiento de odio cuando se es consciente que has generado dependencia y quieres dejarlo pero no puedes. Por lo que a mi respecta alimentar dicho sentimiento en un contexto así, es contraproducente y muy dañino para el paciente. Por respeto a la persona que se trata y ética profesional lo más indicado es derivar al paciente a otro terapeuta lo antes posible. Si es demasiado tarde debería tratarse como una adicción más y que el terapeuta inexperto fuera sancionado de algún modo o retirado de su profesión por incompetente…

      1. hola laura, mi marido se enamoro de su terapeuta, por un tratamiento a las drogas que el tuvo, hace un mes le dieron el alta, el piensa en ella, busca como enamorarla, dice estar sufriendo por amor, solo que hace poco me di cuenta. porque que el dijo no amarme mas y que se va a ir de la casa y ahí me di cuenta que algo pasaba y espese a ver en su celular y encontré todas estas cosas ahí, donde el al parecer necesitas respuestas, es algo muy fuerte al parecer para querer dejar a su familia ¿ que hago ? ¿ se le pasara este amor? ¿cuanto durara ? son 20 años de casados estoy destrozada

        1. Yo diría como medio perverso todo, porque he visto películas dónde el paciente por esto se ha suicidado, u otras en las que ha abandonado un tratamiento

  2. Es duro que te guste tu psicólogo, creo que a mí me está pasando. Soy consciente que no me va a corresponder, él no ha hecho nada que a mí me de pié, y por otro lado soy consciente que es una relación profesional, nada más.
    ?Pero qué hace uno? Yo no le voy a decir qué me pasa, entonces no sería capaz de volver a consulta, y considero que es buen profesional. Pero para mí es muy duro sobrellevar esto sola. A veces fantaseo con él y me doy cuenta que eso solo sirve para hacerme daño yo misma.
    Gracias por leerme.

    Un saludo.

  3. Por otro lado no sé si él nota todo esto que escribo. A mi no me ha dicho nada desde luego pero he visto que, a veces, lleva anillo, y me da mucha vergüenza porque creo que está pensando «estoy casado, no se te ocurra abordarme» …en fin… ?

  4. Hola, quería comentar lo que me pasó, hace 5 meses que estoy haciendo terapia, en las primeras sesiones hubo situaciones que me parecían particulares y a la vez me atraían, como por ejemplo que me reciba la terapeuta con ropa muy ajustada ( por ahí ella es siempre así, no lo se, pero nunca me paso en otras terapias), con los labios muy pintados de rosa, que se cruce de piernas al punto de quedar de costado, o que se ponga la lapicera en la boca mientras me hablaba, luego de eso cambió el comportamiento y se recato como lo profesional que es. El tema es que para ese momento ya me sentía muy atraído-enamorado por ella, físicamente y del lado humano.
    Acudí a la terapia por una situación particular y de pareja, hace un mes me separé. Todas las situaciones vivenciadas en las sesiones de alguna forma interfirieron en tomar mi desicion de separarme. En la ultima sesión le dije que sentía cosas por ella. La psicóloga me dijo que eso era TRANSFERENCIA… y que lo íbamos a hablar en las terapias siguientes. Ahora me pasan algunas cosas que son para mi muy confusas. Por un lado quiero dejar de ir a terapia, por otro me siento mal porque se que tengo un enamoramiento y por mas que en todos lados se explique que es irreal, todavía no lo comprendo y me duele no ser correspondido, y la sensación de que se terminó algo que nunca empezó, y tener que hacer otro duelo o sumar otro problema a los que tenia me hace estar mal. Por otra parte la psicóloga pienso que sabía que esto me iba a pasar y sin embargo me llevó hasta el fin ( con sus coqueteos) sin pensar que para mi es difícil sobrellevar esta situación dado que acudí a terapia por problemas y siento eso como un problema mas. Perdí mucha confianza en la terapeuta y por mi forma de ser me va costar volver a abrirme.
    Si se entendió lo que conté le pido que por favor me de su opinión o me pueda orientar mejor a tomar mis decisiones, sobre como continuar, muchas gracias saludos.

    1. Me encanta que nunca decis su nombre… Decis mi psicologa… No estas enamorado de una persona. Te estas enamorando de otra cosa… Vofi…

  5. Estimados reciban un saludo cordial. Les escribo porque he estado investigando acerca de la transferencia y contratransferencia por un caso personal, y me parece que ustedes puede darme alguna asesoría.

    Estoy acudiendo a terapia con una psicóloga por problemas de pareja. En principio estaba acudiendo solo. Llevo 6 sesiones con ella. En la cuarta sesión personal, mi esposa decidió incorporarse a la terapia. El caso es que desde hace varias sesiones he sentido una atracción muy fuerte hacia mi psicóloga.

    Ella es joven, y muy linda. Siento que irradia una personalidad interesante e intelectual, que cuando se conjuga con su atractivo físico, me resulta muy encantadora. En mi primera sesión, al verla y darle la mano…me dije que chica más linda, pero todo llegó hasta allí.

    Al sentir todas estas cosas, a veces sentía un cierto flirteo de su parte pero nada más. Siempre he pensado que son ideas mías.

    La última sesión le comenté lo que me pasaba porque he leído un poco del tema y sugieren que es beneficioso que lo comente con mi psicóloga. Luego le comenté que había leído de como hacer estas cosas, y me dijo…¿Que has leído al respecto de como se maneja?.

    Luego, me comentó que algunas veces es mejor cambiar de terapeuta (lo cual sentí de forma algo radical), sin hablar del caso porque estábamos terminando la sesión. Al final me comentó que eso lo hablaríamos en una próxima sesión individual, porque mi esposa no debía enterarse de esto.

    He leído un poco en relación a transferencia y noto que estoy en una transferencia positiva de tipo erótica. En mis lecturas recomiendan que esto sea tomado por el terapeuta para ayudar a resolver mi problema. En base a esto, le planteo ver si podría responderme estas 4 preguntas:

    1) ¿Debo cambiar de terapeuta de forma inmediata sin que este caso sea abordado con mi psicóloga?

    2) ¿Existe algún tipo de complicidad de mi psicóloga en este caso si seguimos la terapia?

    3) ¿Si yo decido seguir, y mi psicóloga no lo desea, se puede deber a alguna contratransferencia?

    4) ¿Se puede deber este caso a falta de deseos y atractivos de mi pareja?

    Saludos y de antemano, gracias por su atención.

    Carlos.

    1. Carlos…
      1) No.
      2) Que queres decir con «complicidad»?
      3) Se puede deber a un millón de cosas. No especules. Que ella no quiera seguir no quiere decir que le moviste el piso, ni que esta confundida por vos. Lo que pasa es que te morís por encontrar la forma de comprobarlo…
      4) Es una buena pregunta. Seguramente algo de lo que te pasa con tu psicóloga este relacionado con eso que llamas «falta de deseos y atractivos» (parece la descripción de un parque de diversiones venido a menos). te tiro las preguntas que se me ocurren: ¿Por que las comparas? ¿Vos estas falto de deseo o ella..? No se entiende. ¿Fijate en que es lo que tanto te gusta? Ahi esta la clave…

  6. Quisiera saber… qué posibilidad hay de que este sea un amor legítimo? en el caso de que sea correspondido por el terapeuta, que se explique como la fantasía y como una mal interpretación de la aceptación incondicional y de la empatía y aún así el paciente insista en que su amor es real pero no de tipo transferencia, que posibilidad hay de que se termine la relación terapéutica y luego continúen una relación de amistad o de pareja porque el amor surgió en ambos de manera legítima? Es esto posible? es antitético? sobrevivirá o en algún momento el enamoramiento desaparecerá?

  7. Yo también me he enamorado de mi psicólogo se lo dije por mensaje que había un sentimiento por el, que no sería capaz de decírselo de frente y ya no dije más, me dijo que era transferencia y como yo también estudié psicología lo sabía, y que lo halagaba pero me dijo que era parte del trabajo psicológico, ese día sentí un balde de agua fría por que obvio el es profesional y lo sabía, pero sentí tristeza, y cuando vemos nuestros estados de whatsapp me da mucha alegría, por ahora pienso no regresar mas a terapia me da mucho miedo, mi amiga psicóloga dice que también es un sentimiento de resistencia a la terapia

  8. Yo tuve una relación con mi psicoanalista, hace 5 años, y aún me afecta. Esto va dirigido a quienes esten tentadas/os a tener una relación con su psicoanalista/psicologo.
    En mi casi el tipo en cuestión me sedujo durante meses (en los chats e emails que conservo entre ambos lo admite, diciendo cosas como que tenia ganas de acostarse conmigo desde la 3ra o 4ta sesión, o que se tenia que reprimir las ganas de besarme en ocasiones, y así), obviamente yo que llegué con una depresión tremenda y sintiendo que no valía nada, y ante esa seducción que yo viví como reivindicación de mi valor por parte de quien para mi era una figura de autoridad (porque eso es lo que pasa con un psicologo, uno le da el lugar de «el que sabe de uno mas que uno mismo»), bueno, ante esa seducción de su parte yo me enamoré y comencé a seducirlo activamente también, es confuso como se da esto, yo tuve que rearmar la historia releyendo chats, emails, y escribiendo todo lo que recordaba de la manera más detallada posible, y se me cayó la fantasía de amor. Luego de 9 meses de psicoanálisis terminamos acostandonos en su diván, y días después empezó con que no quería una novia, que mi demanda era absorbente, que necesitaba extrañarme para desearme etc… en fin, la relación duró poco más de 2 meses y me dejó de hablar y así se terminó (dejó de contestarme msjs y el teléfono, y ya). Me quedé en un estado de angustia que duró aprox. 2 años, luego de los cuales con altos y bajos acá estoy, hasta diría que más fuerte porque no creia que podía superar un abandono semejante de alguien en quien confiaba absolutamente, pero no puedo darle a él el mérito de mi propia fortaleza (aunque durante años lo hice jajaja es muy loca la disonancia cognitiva que te generan este tipo de abusos solapados, hace poco leí que la mayoría de victimas de incesto seducen activamente a sus abusadores y pasan por una dinámica casi idéntica donde justifican y hasta aman a sus abusadores y se culpan por lo sucedido, pero el terapeuta SIEMPRE tiene la responsabilidad ética). Volviendo al tema de la confianza, no se trata solo de que confiar sea un requerimiento en cualquier psicoterapia, sino en la confianza o garantía que una supone en la transgresión, porque cuando un psic. transgrede su ética, una supone que es especial y vale mucho, y por eso se juegan la licencia, no? bueno… no. La verdad a la distancia se siente casi como una violación, o más bien como algo incestuoso ya que una está en una posición muy vulnerable, en una tremenda asimetrtía de poder, y transfiere sentimientos muy infantiles, regresivos. Sin ánimos de sonar como un cliché pero yo lo sentía casi como un padre ideal, la garantía de mi cura (porque durante el análisis me ayudó mucho) alguien con quien podía hablar de todo, que me aceptaba y me quería como era (aunque luego de comenzar la relación sexual empezó a decirme que en terapia me bancaba porque era su trabajo, pero que si le hacía reclamos se iba a alejar, si lo peleaba se iba a alejar, y así. A tener en cuenta ese detalle!).
    Una sabe que se trata de alguien que casi no se conoce, que el amor es transferencial y punto, y que ellos conocen bien los síntomas de uno y tienen herramientas para manejar la situación desde una posición de poder tremenda, pero como se estan jugando el trabajo les suponés amor genuino… otro detalle a tener en cuenta: CONOCEN TUS SÍNTOMAS! por algo y segun encuestas esto casi nunca se denuncia a pesar de que la mayoría te usa y te desecha! (más info en survivingtherapistabuse y TELL)
    No soy dogmatica al punto de creer que en todo caso es dañino, algunos casos marginales se que funcionan donde paciente y terapeuta incluso se casan y forman una familia, pero la verdad es que eso casi nunca ocurre, y en la mayoría de los casos te usan un tiempo como objeto sexual y luego cuando se agobian porque una estaba enamorada y ellos no, te dejan sin más. Supongo que actúan con tanta impunidad porque, al conocer los síntomas de sus paciente, es mucho más fácil elegir «presa»: elegir a la que es muy piadosa, a la que no confronta, a la tímida, a la muy dependiente, a la que «espera mucho», etc
    Yo, 5 años después, estoy por denunciar mi caso porque aun conservo todos nuestros chats e emails (por suerte no los borré), aún asi es muy doloroso porque, como ocurre en muchos casos de abuso de parte de alguien querido, hay mucha ambivalencia sentimental, un síndrome de estocolmo manifiesto y como se supone que sos una adulta que consintió no te entiende casi nadie (en una relación de tanta asimetría de poder donde la transferencia es condición de la cura, no se puede considerar el consentimiento como defensa del psicologo que transgrede su ética, pero eso no lo entiende el común de la gente, no hay leyes claras al respecto, solo se puede acudir a los colegios de psicólogos, entonces te sentís juzgada incluso si hablás del tema), sumado a que a una misma le da lástima que haya repercusiones como el cese de su licencia… ufff que más decir que ¡¡¡no se metan con el psicólogo!! menos en una terapia psicoanalítica, que es mucho mas intensa en lo transferencial. Y si se meten, conserven pruebas, porque al menos así, si las dejan como basura, pueden reclamar justicia eventualmente. Probablente pasen años porque al principio una espera que la quieran y no quiere hacer nada que decepcione al objeto de amor, porque una se siente especial, siente que vivió una gran historia de amor, que el otro realizó un gesto de amor «heroico» entonces seguramente era amor real, justifica todo el destrato y las degradaciones, hasta que un día se da cuenta de que, analizando los hechos aislados de la retórica de goce masoquista, la situación fue de abuso y ya, y ahí se complica sostener la fantasía y te sentís muy imbécil.
    Mi caso es particularmente cruel porque me dejaron casi de inmediato y en silencio, sin siquiera un cierre. El mes pasado insistí por whatsapp hasta que me respondió (por fin, luego de mas de 5 años) pero me trató de «ex paciente en crisis» que necesitaba ayuda profesional!! por eso insisto, si llegan a iniciar una relación romántica con su psicólogo, en primer lugar, les deseo suerte, y ojalá resulte, pero en segundo lugar y por las dudas GUARDEN EVIDENCIA de que la relación efectivamente tuvo lugar (no hagan cosas simbólicas de cierre, que no sirven a la larga, como tirar cartas o borrar mensajes o quemar cosas), hay mucha gente perversa suelta y los psicologos estan en una posición de privilegio para actuar esas inclinaciones (con muchas garantías de impunidad).
    Disculpas por la extensión del mensaje y por las desprolijidades y repeticiones, estoy en un proceso de empezar a hablar por donde puedo cuando me sale y si cuido los detalles me quedo muda (algo que mi ex analista sabía muy bien de mi: posponía mucho mis actos, quería que todo fuera perfecto y prefería no hacer nada a que salga mal, no exponerme con riesgos de error… bueno, ya no, pero lo que me da más tristeza a fin de cuentas es que, en vista de la impunidad con que me trató inclusive hace semanas, su deseo necesariamente era que yo siga así de neurótica por siempre, y con ese superyo enorme castrándome a mí para que le tape la falta a él)
    Saludos desde Argentina, el país con más psicólogos per cápita del mundo.

    1. Hola leticia, lei tu comentario y fue sentirme representada por todo lo que viviste, excepto que lo mio es actual y realmente estoy pasando por un momento de confusion, si no es molestia me gustaria hablar con vos para intercambiar opiniones. Tambien soy de Argentina. Espero tu respuesta. Saludos

  9. Estuve acudiendo a terapia de pareja, mi hijo adolescente también asistía de forma individual. Al final me separé de mi esposo en abril y actualmente me entero que vive con la supuesta terapeuta que nos iba a ayudar a reestructurar nuestra familia, mi hijo está sumamente enojado con el papá y yo… completamente destrozada.

  10. Fui a mi psicóloga hace un año para tratar un tema personal muy concreto. Poco a poco me di cuenta que mi crises personal era mucho más profunda de lo que inicialmente yo pensaba. Es lo cierto que me he sentido tan comprendido por mi psicóloga que hoy por hoy es la persona del mundo en quien más confío y la única persona a la que le he puesto mi alma, mis sentimientos y emociones al descubierto. No se si llamar a esto amor ya que la relación es puramente profesional, y hablar de amor, entiendo que debe ser algo más profundo. No obstante, mis sentimientos hacia ella son muy fuertes y, creo que el día que me dé el alta, no sé cómo voy a seguir adelante. Siento que la necesito a ella para seguir adelante con mi vida y solo pensar en no volver a verla, me dan todos los males.

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