Para entender de qué forma y por qué se produce el autoengaño lo contextualizaremos dentro de las formas de adicción qué existen, como son las drogas y el enamoramiento. ¿Alguien no se ha preguntado alguna vez por qué es tan difícil escapar de una relación conflictiva o de alguna adicción a una droga?
Cuando alguien, por ejemplo, fuma marihuana muy a menudo y le dices que lo que consume es una droga y tiene efectos negativos para su salud, ésta inmediatamente te contesta diciéndote que no fuma tanto, que puede dejarla cuando quiera; pero que ésta le hace sentir bien y estar tranquilo. Otro ejemplo es el de una chica que se enamora de un chico. Al cabo del año de relación, él ya la ha insultado, humillado, se pelean constantemente; pero ella sigue diciendo que esto es normal en todas las parejas, que en el fondo él es bueno. ¿Qué nos hace pensar todo esto? ¿No son la misma forma de engañarnos a nosotros/as mismos/as? Ahora pasaremos a analizarlas más detenidamente.
- Autoengaño y adicción
Si preguntásemos a personas cercanas al adicto que no los describieran, emplearían la palabra“mentiroso” ¿Se puede considerar realmente mentirosa a la persona adicta?
Para contestar a esta pregunta, vamos a partir de la premisa de que el engaño forma parte de la constelación sociopática general del adicto, condición aprendida y desarrollada a lo largo de toda su vida (Sirvent, 1989). La persona adicta aprende a mentir al percibir su vida como una difícil tarea que se ve incapaz de desempeñar sin justificarse, por actuar de forma que él considera socialmente inaceptable. A fuerza de repetir engaños, el sujeto los termina interiorizando, del tal forma que termina confundiendo realidad con ficción, siguiendo la ley de “responder siempre a aquello que más me convenga”sea o no verdad. La mentira lleva siempre al autoengaño, teniendo éste un carácter acomodaticio.
En principio, podemos decir que todo el mundo está autoengañado y este engaño no será perjudicial hasta que el autoengaño afecte a una parte importante de tu vida y tengas que eliminarlo, manejándote con ideas claras. Por lo tanto, un adicto no puede mantenerse autoengañado con relación a su dependencia; pues si lo hace, recaerá una y otra vez sin apenas darse cuenta. Y esto depende, en gran medida, del autocontrol del que dispongamos cada individuo.
- “El autoengaño creativo”
Se utilizan encuestas en las que se les pregunta a los participantes el número de relaciones sexualesque ha tenido en su vida.
Pongamos como ejemplo la encuesta que se llevó a cabo recientemente en la Universidad de Michigan (Norman R. Brown) en la que se midió la respuesta de 2.065 personas sexualmente activas, alrededor de los 40 años de edad. Las mujeres afirmaron unas 8,6 parejas sexuales, mientras que los hombres unas 31,9. Después del experimento, discutieron sus respuestas y casi el 10% admitió no ser honesto del todo.
Posiblemente éste fenómeno esté ligado a la autoestima; de forma que cuando las personas sienten que su autoestima está en peligro, acuden a la mentira.
- Autoengaño en la pareja
Partiremos de la idea que el enamoramiento se produce por una imagen preconcebida de la relación. Así pues, cuando de se trata de relaciones sentimentales, la razón pierde la batalla dejando paso a incontrolables emociones. A consecuencia de ello, puede pasar que el sujeto se sienta feliz o absolutamente desgraciado.
En el libro Psicopatología de la vida amorosa, encontramos quince casos de desengaño, relacionados todos con el autoengaño, los cuales llegaron a convertirse en patología. De esta forma, se corrobora que el enamoramiento es una realidad inventada llegando a convertirse en profecía, porque cada persona tiene una idea hecha de cómo debería ser una relación. Así, si todo lo que sucede es positivo nos encontraremos satisfechos; pero si por el contrario, no se consigue lo que se esperaba, nos frustraremos.
Por lo tanto, el autoengaño aparece y se fusiona con la realidad y esto hace que la relación se deteriore. Se produce un choque entre las creencias de la persona: ej. Es una persona adecuada para mí; y lo que las sensaciones indican: ej. El malestar o sufrimiento por el comportamiento del otro. Esta gran desproporción entre lo que se cree y se siente hace que el sujeto esté tenso e intente reducir este malestar. Mientras mayor sea la desproporción, mayor será la intensidad emocional que se utilizará para disminuirla. Se utiliza la palabra “ceguera localizada” para denominar a este fenómeno en el que la persona que está enamorada no percibe lo que para los demás es evidente.
Otro ejemplo es el del “síndrome de la princesa y el sapo” por el cual, la mujer intenta cambiar a su pareja hasta que esta encaje en el perfil de príncipe que ella había previamente ideado.
Este libro identifica tres perfiles a la hora de afrontar el autoengaño:
1.- El que se rinde que contempla desolado los escombros de la relación y donde predomina el dolor, el miedo, la tristeza, la vergüenza, etc.
2.- El que renuncia son personas que a pesar del dolor que sienten, no son capaces de abandonar a su pareja, lo que les ocasiona una agresividad que dirigen contra sí mismos.
3.- El que lucha la persona no está dispuesta a abandonar sus creencias e intenta restaurar a toda costa las certezas originarias, ignorando los hechos. Esto lleva a situaciones de acoso y sentimientos de venganza hacia la otra persona.
- CONCLUSIÓN
Cómo hemos podido comprobar, el autoengaño está muy presente y relacionado con las diferentesadicciones, pues esta es una forma de enganche que nos proporciona la puerta de entrada a un laberinto del que nos es, en muchas ocasiones, imposible de salir. Solo hay que recordar diferentes modos de comportarse y de pensar que tienen los adictos, ya sea a una droga, a otra persona, las compras, etc. Siempre intentan decirse una y otra mentira para mantener su adicción, para no renunciar a aquello que les da tanto placer. Pero ¿son estas personas conscientes de que están continuamente engañándose a sí mismas? Probablemente no, porque el temor a descubrir que lo que les perjudica es su forma de pensar y actuar, les causaría un gran malestar. Es más fácil para ellos/as seguir metidos en ese bucle de mentiras, en ese mundo paralelo que se han creado antes de vivir la realidad.
Por ejemplo, en las relaciones de pareja, cuando el chico es celoso y empieza a buscar indicaciones que le afirman sus premisas de que la chica le está engañando: una llamada de otro chico en el móvil, saluda a algún amigo, o se ha comprado ropa nueva. Empieza a crearse un sin fin de mentiras que se dice a sí mismo, que no corrobora, simplemente él tiene la certeza de que ella le está mintiendo y no va a parar hasta acabar con la relación. Por lo tanto, podría decir, que el autoengaño es autodestructivo, para la misma persona y para aquellos/as que estén a su alrededor. Por ello hay que trabajar sobre ello en el momento que se detecte la primera mentira, antes de que sea demasiado tarde.
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