La epilepsia no es una enfermedad sino un conjunto de síntomas que se manifiestan por crisis repetidas y que puede ser resultado de muchas enfermedades diferentes del encéfalo.
El 30% de los casos de epilepsia se debe al grupo de epilepsia sintomática. Las causas pueden ser traumatismo craneal, una malformación del encéfalo, falta de oxigeno durante el nacimiento, un tumor encefálico, alcoholismo, meningitis, etc. Las crisis a menudo comienzan en un grupo pequeño de neuronas que rodean el área afectada antes de extenderse a áreas más grandes.
El 70% restante de las personas con epilepsia tienen la forma idiopática o desconocida. Se presume que la causa son cambios químicos más difusos en el encéfalo. Las crisis se originan en el área central del encéfalo en interacción con la corteza cerebral y afectan de inmediato a todo el encéfalo.
Muchas crisis dañan el encéfalo por sí solas debido a los efectos posteriores de la crisis. Puede haber muerte celular por falta de oxigenación, por una concentración excesiva de Glutamato, que puede producir un desequilibrio en el balance de sal del encéfalo, y especialmente el calcio extra puede dañar las células muy activas. También puede producirse pequeñas hemorragias como consecuencia de la presión elevada en los vasos sanguíneos que drenan la sangre del encéfalo.
Las crisis epilépticas, cualquiera que sea su tipo, siempre son causadas por una transmisión excesivamente enérgica de impulsos en el encéfalo. En teoría, existen dos factores que podrían causarlas:
El primer factor es referido al neurotransmisor GABA. Si la red neuronal inhibitoria no funciona como debiera, las otras neuronas tienen vía libre y comienzan a trasmitir impulsos epilépticos descontrolados. Esto ocurre cuando la concentración del neurotransmisor inhibitorio GABA no es normal.
La otra posibilidad es cuando los estimuladores son demasiado potentes. Esto podría suceder cuando el neurotransmisor excitatorio Glutamato es muy alto en el encéfalo.
Las crisis epilépticas
- Crisis generalizadas
Las descargas anómalas que generan crisis generalizadas se originan en la porción central del encéfalo y se extienden a toda la superficie. Son espontáneas y siempre conducen a pérdida de la conciencia.
- Convulsiones generalizadas: La persona cae al suelo sin advertencia. La respiración se detiene y los brazos y las piernas se tornan rígidos (fase tónica), luego comienza a temblar y sacudirse (fase clónica). Después la persona yace quieta, a menudo con el rostro de color azul, hasta que la respiración se normaliza. La mayoría de las personas caen en un sueño profundo después de una crisis y algunas pueden perder el control vesical y rectal durante una crisis.
- Ausencias: Son crisis menores, ocurren en varios tipos de epilepsia infantil y en raros casos también en adultos. La crisis se inicia sin advertencia y consiste en intervalos breves de pérdida de conciencia durante los cuales el niño esta temporalmente desconectado. En contraste con todos los demás tipos de crisis, las ausencias ocurren con mucha frecuencia.
- Crisis parciales
Éstas son causadas por descargas eléctricas anormales en un área localizada del encéfalo. Hay dos tipos:
- Crisis parciales simples: Son crisis causadas por descargas anormales localizadas que no afectan a la conciencia, aunque pueden evolucionar a crisis parciales complejas si se altera la conciencia.Las crisis parciales simples son iguales al aura; es decir, advertencias de que ha comenzado una crisis. El aura más habitual es una sensación poco característica en el cuerpo, que se origina en el estomago y llega a la cabeza, pero también puede comprender luz, sonido, olfato, gusto u otras sensaciones.
En algunas circunstancias las anomalías se originan en el área de la corteza cerebral que controla el movimiento de los músculos o el sentido del tacto o el dolor. Así, se pueden producir cambios en la percepción del tiempo, en la percepción de la luz, el sonido y el espacio, en la percepción de escala, cuadros de sueño similar a la vida, una sensación de vacío interior, ansiedad pronunciada…
- Crisis parciales complejas: Son crisis causadas por una descarga anormal localizada que conduce a una alteración de la conciencia. En este tipo de crisis las descargas anormales están localizadas principalmente en los lóbulos temporales. Durante las crisis aparecen automatismos, es común observar masticatorios,
gestuales y otros movimientos repetitivos y sin propósito, denominados estereotipias.
Tanto en las crisis parciales complejas como en las simples las descargas eléctricas pueden extenderse a todo el encéfalo. Esto se denomina generalización secundaria y conduce a que las crisis terminen con convulsiones generalizadas y pérdida del conocimiento.
Déficits neuropsicológicos selectivos en las epilepsias
- Disminución de la memoria.
- Reducción de la capacidad de atención.
- Trastornos de las habilidades perceptivo-motoras.
- Enlentecimiento del proceso mental.
- Deficiente habilidad aritmética.
- Dificultades para el aprendizaje de la lectura.
- Dificultades para la escritura al dictado.
En casos graves, puede desembocar en demencia e incluso la muerte.
Bibliografía
Sánchez Caro, Jesús: ”Perfiles neuropsicológicos en pacientes epilépticos”, Universidad Complutense de Madrid.
www.starnet.net.mx/epilepsia/bb2.html
www.neurositio.com/epilepsia/-3k-
http://infodoctor.org/neuro/cap4.htm