Los cambios evolutivos que sufren los nervios periféricos y las partes neurohormonales del SN durante el proceso de la filogénesis, son insignificantes con los cambios que tienen lugar en las conexiones dentro del encéfalo. La evolución de una conducta más compleja, que la que presentan los organismos invertebrados, es debida
en su mayor parte a incremento de la complejidad dentro del tronco del encéfalo y, especialmente, dentro del telencéfalo.
Algunos de estos cambios van acompañados de cambios en el esqueleto, músculos u otros tejidos y órganos (relacionados con el cambio de las formas acuáticas a terrestres, o con la evolución de una postura erecta), pero
otros se producen como consecuencia del aumento de complejidad en la conducta con el
fin de conseguir una mejor adaptación al medio.
Ser humano con un encéfalo único
La tendencia hacia un cerebro más grande y una corteza cerebral más elaborada
culmina en el ser humano. Lo que hace que el humano sea único queda recogido en las
siguientes carácterísticas:
a) Locomoción con las extremidades posteriores (inferiores), dejando las
extremidades anteriores libres para otras funciones.
b) Mano prensil: fabricación de herramientas y desarrollo de la tecnología.
c) Agrandamiento del cerebro con respecto al tamaño corporal.
d) Desarrollo del habla y del lenguaje.
e) Desarrollo de interacciones sociales y de la cultura; juventud prolongada, división
del trabajo en sociedad, etc.
f) Expresión individual artística y espiritual.
Estos atributos humanos dependen de la corteza cerebral, especialmente de un incremento en la parte anterior del encéfalo y de una diferenciación de la corteza a medida que se asciende desde los peces hasta los mamíferos.
El encéfalo en los vertebrados inferiores el telencéfalo surge en estrecha relación
con el sistema olfatorio. El bulbo olfatorio recibe la entrada de los receptores sensoriales de la nariz y, a su vez, envía fibras a todo el telencéfalo. En algunos vertebrados, el telencéfalo está hasta tal punto dominado por el sistema olfatorio que podría denominarse encéfalo olfatorio. Otra porción importante es la parte media del encéfalo. Esta región se encuentra relacionada con el sistema visual, siendo un centro clave para integra los estímulos visuales con la respuesta motora. Las células nerviosas de esta región se conectan con la médula espinal para controlar los músculos en relación a la estimulación visual.
Durante la evolución gran parte del desarrollo del cerebro se encuentra relacionada con las informaciones, olfativas, visuales y somestésicas, al igual que con los complejos mecanismos motores y centrales. A pesar de la modificación de cada parte del sistema nervioso central durante la evolución, la cadena primitiva de estructuras permanece reconocible. La elaboración de las partes superiores del encéfalo para aumentar la complejidad del procesado de la información y del control comportamental es una muestra del proceso de encefalización.
Bibliografía:
Cisneros, C. C. NEUROCIENCIA DE LA CONDUCTA.